FERTILIDAD Y CONOCIMIENTO

Utilizo como punto de partida una frase de una psicoanalista (J. Guerrero) pronunciada en unas Jornadas sobre mujeres de Octubre del 2009:“Las mujeres que han tenido vida privada, es decir han cultivado su individualidad, han construido su singularidad y han gestionado su propio tiempo. Han sabido diversificar sus intereses “y han aprendido a escuchar sus propios deseos en referencia a su realidad pueden desarrollar su vida y llegar a la menopausia con más recursos y más integridad personal que las mujeres que se han dedicado a sostener el rol impuesto o han comulgado con el esteriotipo imperante sin haber decidido si deseaban vivir de ese modo.

Y esto viene al caso al pensar en la importancia del aprendizaje de nuestra propia singularidad en el conocimiento de nuestra fertilidad, pues el tiempo que nos renueva cíclicamente y nos permite reiniciarnos con una semejanza a los cambios de presentación de la luna, puede a largo plazo propiciarnos que esa observación somera, práctica y sistemática nos haga no solamente conscientes de nuestro día a día, sino que construya casi invisiblemente esa sensación personal de sujeto de la propia vida.

La toma de consciencia y de responsabilidad de nuestra propia fertilidad femenina permite no exponerse a agresiones gratuitas y que contribuyen al deterioro, es decir a la ingesta de alteradores hormonales y/o al recurso sanitario de las interrupciones voluntarias de la gestación no deseada, pues parto de la base que nadie desea abortar y que siempre es un mal menor circunstancial.

La mejor prevención de los desordenes somáticos y psicológicos debería empezar por la toma de contacto con la propia realidad: qué me pasa, qué siento, qué sé de mí misma, qué necesito y no estoy hablando de estar todo el día “comiéndose el coco” y/o “mirándose el ombligo”, me estoy refiriendo a poder mirar hacia adentro cuando se mantiene la mirada afuera.
En actuar en una percepción de presente absoluta, donde también existe una misma como raíz de la acción pero no por el impulso inicial, sino por la conciencia de la ejecución.

Es súper fácil aprender a conocer el ciclo menstrual, con un mínimo de sistemática y ayuda la interpretación es evidente y permite poder manejarse en muchos terrenos con muchísima más seguridad y confianza. Existen pocas cosas que ofrezcan tanto por tan poco.
Que mejor que plantearse en esta primavera ver como en una misma cada mes se refleja el potencial júbilo de la vida en su intento de perpetuarse y renovarse.